viernes, 3 de septiembre de 2010

Por esa luz que te hace brillar

Cada segundo fue eterno y cada minuto un abismo en donde la desesperacion se batió a duelo con mi conciencia, ahí estabas vos, me enseñaste a ser paciente y a respetar tus tiempos, a contar cada segundo de tu ausencia y a sumar los minutos para que la espera no se hiciese eterna, me enseñaste en su momento a creer que vos no eras para mi ni yo era para vos y que ninguno de los dos iba a depender del sentimiento que nos hizo tan fuertes, me enseñaste a descubrir cada rincón de tu alma desnuda y cada secreto escondido en tu corazón, ayer soñé con algo que te iba a decir y que cuando desperté lo olvide, era algo que jamas había escuchado y que había salido de mi, me recordaba a vos, lo perdí entre tus mejores recuerdos y cada palabra me llevo a tu nombre, cada situación me llevo a vos, me enseñaste tus manos y me diste tu mejor consuelo, las caricias que me dejaban dormir y me daban los mejores sueños, aprendí a encontrar tus labios en las noches cada vez que me sentí perdido o simplemente ansiaba volar y perderme en cada rincón de tu cuerpo...